A casi tres décadas del estreno de la comedia original (Happy Gilmore, 1996), Adam Sandler retoma su icónico rol del golfista temperamental para protagonizar la esperada secuela que ya se está convirtiendo en uno de los estrenos televisivos más anticipados del verano.
La noticia del
regreso fue confirmada y viralizada tras el lanzamiento del trailer y la
estrategia de promoción de Netflix (people.com).
En Happy Gilmore 2, dirigido por Kyle Newacheck
y escrito por Sandler junto al veterano Tim Herlihy, descubriremos que Happy —ya
retirado y convertido en padre— decide volver al golf profesional para
financiar la educación de ballet de su hija, Vienna, interpretada por Sunny
Sandler.
Este enfoque familiar añade un toque emotivo al humor cargado de golpes y
exabruptos que caracterizaron al personaje hace 29 años.
El regreso del elenco original eleva la nostalgia:
Julie Bowen retoma el papel de Virginia Venit, mientras Christopher McDonald y
Ben Stiller también regresan, igual que en la película de 1996.
Bowen confesó estar sorprendida de volver tras tantos años, destacando la
calidez humana de Sandler en el set y la alegría de reencontrarse con el
personaje (decider.com).
El film no escatima en cameos: Travis Kelce, Bad Bunny
y Eminem se suman a la trama junto con destacados golfistas como Rory McIlroy,
Scottie Scheffler, Bryson DeChambeau, Jack Nicklaus y John Daly.
La aparición de figuras del deporte y la música reafirma el espíritu festivo y
amplio del lanzamiento.
Desde Netflix, el 25 de julio de 2025 fue la fecha
elegida para el estreno mundial, exclusivamente en streaming; no se contempla
estreno en salas, siguiendo la estrategia actual de la plataforma para grandes
comedias (9meters.com).
El avance cinematográfico estrenado en Tudum y otros
eventos ofrece un vistazo directo a un Happy más maduro, enfrentándose a nuevas
generaciones y reinventándose en un golf que ya no es el mismo (gamesradar.com).
En Reddit, los primeros comentarios exaltan su tono “más genuino y maduro” al
tiempo que conserva su sello cómico clásico, con algunos señalando momentos
puntuales como especialmente emotivos.
En cuanto a expectativas, esta secuela representa una
apuesta de Netflix por revivir un producto de culto con una combinación de
nostalgia, elenco vigente y colaboraciones inesperadas. La fórmula ya ha
probado su efectividad anteriormente, y la renovación del personaje promete
atraer tanto a fans de la película original como a nuevas audiencias.
El verdadero golpe de gracia será el juicio del público a partir del 25 de julio. ¿Logrará Happy Gilmore 2 recuperar la irreverencia y el carisma del original? Todo indica que Sandler apuesta a combinar humor con ternura, apoyo familiar y cameos irresistibles para mantener fresca la esencia del personaje y ofrecer un regreso que resuene en pleno verano. ¡Que comience el torneo!
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